martes, 28 de octubre de 2014

SUMERIA, POSIBLE ORIGEN DE LOS REPTILIANOS. (ANUNNAKI)

Báalam 


En la versión oficial el primer pueblo que destacó sobre las demás culturas de su época fue la Civilización de Sumeria, cuna de la Historia-moderna. Procedían de las montañas al oriente de esta región. En realidad no se sabe mucho de ellos. Este pueblo no era semita, como los fenicios, hebreos, sirios y otros de Mesopotamia. Tampoco se les han logrado relacionar con ningún otro grupo étnico de África, Asia, o Europa. Aunque tenían cierta influencia de la cultura hindú. La civilización sumeria, aparecida de la noche a la mañana, con una estructura social extremadamente compleja, la agricultura, la metalurgia, la alfarería, la música, la medicina, las leyes, etc… alcanzaron una dimensión totalmente desconocida en un periodo brevísimo de tiempo. Llevaron al ser humano a la edad de bronce cuando lograron fundir el plomo y el cobre para lograr éste otro metal de mayor fortaleza. La navegación fue más allá de los ríos. Tuvieron naves y barcos que navegaban en el Golfo Pérsico. La esclavitud surgió como medida humana. Los sumerios, eran grandes observadores del cielo. 


Ellos conocían la existencia de todos los planetas del Sistema Solar, desde Mercurio a Plutón, éste último descubierto a principios del siglo 20. Y la presencia de un planeta más, con una órbita alrededor del Sol gigantesca (cada 3.600 años), del cual procedían los “Anunnaki”, los dioses de su panteón y que en sus principios fueron el génesis de la vida sobre la Tierra y la causa de la rápida evolución del hombre en nuestro mundo mediante intervención genética. Para los sumerios, al igual que para otros muchos pueblos de la antigüedad, sus dioses fueron seres de carne y hueso que un día habitaron entre ellos y de los que aprendieron numerosas actividades y normas de convivencia. Según ellos (al igual que egipcios, mayas o aztecas) sus dioses bajaron a la tierra desde el cielo, mucho antes de la llegada de la humanidad. Los llamaron “Annunaki” y en la Biblia también aparecen con el nombre Nephilim, aunque algunas traducciones erróneas del termino los denomina “gigantes” cuando en realidad es “aquéllos que bajaron de los cielos a la tierra”. Los humanos veían a estos seres como dioses, ya que eran inteligentes, poseían muchas tecnologías y conocimientos y tenían una gran longevidad, aunque eran mortales. Según la interpretación de Sitchin de las tablillas de arcilla sumerias, los Anunnaki, una raza avanzada de extraterrestres, se originaron en nuestro Sistema Solar externo, en el planeta que llaman NIBIRU. Los sumerios sostenían que existe un planeta más en nuestro sistema solar, llamado Niburu, que tiene una órbita elíptica similar a la de un cometa y que tarda 3600 años en dar una vuelta completa alrededor del sol. Varios cilindros sumerios como el famoso VA/243 describen al planeta como uno que tiene una órbita más allá de Plutón y de un color rojo intenso, mucho más grande que la Tierra y cualquier otro cuerpo del sistema. Brown, junto con Drs. Chad Trujillo del Observatorio Gemini, Hawaii, y David Rabinowitz de la Universidad de Yale en New Haven, Conn. , encontraron al objeto tipo-planeta, o planetoide, el 14 de Noviembre del 2003. Los investigadores utilizaron el Telescopio de 48 pulgadas Samuel Oschin en el Observatorio de Caltech en Palomar cerca de San Diego. ¡Hace tan sólo 5 años! Reconocieron oficialmente la existencia de un nuevo planeta al que llamaron “Sedna”. Sedna es en definitiva el objeto más grande encontrado en el sistema solar desde el descubrimiento de Plutón en 1930. La descripción sumeria del Sistema Solar tiene ¡6000 años de antigüedad! e incluía ya Nibiru, que quiere decir “planeta del cruce”. El nombre sale de una leyenda, en donde se supone que en el pasado Nibiru cruzó la órbita de la Tierra y colisionaron, generando la órbita altamente elíptica de Nibiru y el cinturón de asteroides. Las anomalías detectadas con el nuevo planeta entre la Tierra y Jupiter, y la extraña ubicación de Plutón, corresponderían a la irrupción cada 3.600 años de un planeta extrasolar que en sus orígenes desvió la órbita de Plutón a su actual posición y que chocó seguidamente con un planeta situado donde se encuentra el cinturón de asteroides, que serían los restos de esa colisión. Hoy en día, son muchos los científicos que apoyan esta teoría. En la antigüedad, la gente no solo esperaba el regreso periódico del doceavo planeta, si no que trazaron su movimiento en el cielo. Los profetas hebreos consideraban el tiempo en que se acercaba el planeta, uno en que la humanidad entraría en una nueva era. Por cerca de un milenio los sumerios lograron mantener el control de la sección al sur de Mesopotamia. En el siglo 2300 a.C. un rey semita, Sargón I (2350 – 2295 a.C.) de los acadios, logró vencer todos los estados sumerios, estableciendo el primer imperio en Mesopotamia. No tardo mucho para que los acadios fueran absorbidos a la cultura sumeria. Muchos investigadores llegan a la conclusión de que los Annunaki de la Antigua Sumeria que invadieron las montañas caucásicas han continuado, en secreto, controlando y manipulando a la Humanidad. Los descendientes del Rey Annu en Sumeria y Babilonia, pueden ser seguidos a través del tiempo. Los Faraones de Egipto eran de las líneas de sangre de los Reyes Babilónicos. Los dirigentes del Imperio Romano pueden ser rastreados a través de la jerarquía egipcia. A través de toda Europa las familias reales pueden ser seguidas hasta los grandes Emperadores Romanos. 34 de los presidentes americanos descienden directamente de la realeza europea con el restante amparo de que están estrechamente relacionados a estas mismas líneas de sangre. Este hecho presenta la posibilidad de que siempre hemos y siempre hayamos estado esclavizados por nuestros líderes sin diferencia de borregos o ganado. Uno de los importantes dioses de los babilónicos fue Tiamat y su aspecto tradicional es de una serpiente o dragón. De hecho la primera sociedad secreta surgió en Babilonia y se llamo “La hermandad de la serpiente”. Si leéis sobre la guerra de Irak, podréis encontrar información sobre la expoliación del museo nacional de Irak (que llevaron a cabo tropas estadounidenses y otros, aduciendo la seguridad de éstas) donde se encontraba gran cantidad de documentación sobre este tema, tanto en tablillas sumerias como petroglifos, estatuillas y diverso material de importancia capital para desvelar este apasionante misterio. Los Repitlianos Sabemos que hay vida ahí fuera. Tan solo en nuestra Galaxia encontramos unos 50’000 planetas que podrían albergarla. Hay miles de millones de galaxias y pensar que no hay otras formas de vida es solo pura ignorancia. Pero no solo aquí, también en los miles de millones de otros universos que conforman nuestro mundo multi-universo. Nosotros humanos nos pensamos que somos muy importantes, pero en realidad no somos ni nano bacterias, ni microbios microscópicos, insignificantes, un animalito que vive en un planeta diminuto y que recién empezó a desarrollar facultades mentales y psíquicas. Si la Tierra desapareciera, quien se daría cuenta? De todas las formas de vida inteligente que hemos descubierto una merece un capítulo entero, y esa es los reptilianos. En el templo Hathor en Dendera, Egipto, seres humanos de naturaleza reptiliana junto a faraones pueden ser encontrados en las paredes. Los Indios Hopi en Norteamérica cuentan que una raza alienígena BAK’TI manipularon geneticamente animales y crearon al ser humano. Las tradiciones orales enseñan que la raza extraterrestre BAK’TI, al final, perdió el control sobre la raza humana a favor de otra raza que eran depravados reptiles. La tribu Hopi llama a la raza de reptoides los Sheti, o “los hermanos serpiente”, que viven bajo tierra. La tribu Cherokee y otras tribus estadounidenses se refieren también a las gentes reptiles u otras razas de reptoides. En el México ancestral había un rey llamado Quetzalcoatl, que significa pajaro-serpiente. El fue el dios de las estrellas que trajo la civilización y el conocimiento del cosmos a la gente de Centroamérica. Textos del Yucatán conocidos como el “chilaam balaam” dicen que los primeros habitantes de la región fueron conocidos como la “gente de Chanesh” que significa la gente de la serpiente. Fueron gobernados por un rey llamado “Itznamnam” que significa lagarto y se le representa mitad humano y mitad serpiente. Hace 5000 años los Omelcas erigieron estatuas de sus dioses sobre espirales protectoras de gigantescas serpientes. En Sudamérica los mayas enseñaban que sus ancestros eran la gente de la serpiente. Los Aztecas decían haber sido creados por una mujer serpiente. En la mitología precolombina de Colombia, la diosa Bachue, (la primera mujer), se transforma en serpiente. Ella también es llamada la Serpiente Celestial. En el cañón de Sago en Utah, Norteamérica, otra vez veremos seres reptilianos al lado de seres humanos. Quizás el más antiguo de todos los textos de la antigua China, el misterioso I-Ching que describe cómo el ser humano fue modificado genéticamente por una diosa llamada Nu-Kua, la diosa reptiliana de la antigua China cuyos descendentes fueron los emperadores de China. En Japón los Emperadores afirmaban descender de Dioses Dragón que vinieron del cielo. Aborígenes Australianos enseñan sobre una raza reptiliana la cual vive bajo de la Tierra y gobierna sobre los hombres. Creen que descienden de una raza de dragones humanos. India llama a estos Dioses reptilianos, Nagas y afirman que sembraron sus familias reales. En las escrituras Indias y leyendas de Naga se dice que eran reptiles que vivían bajo tierra e interactuaban con los humanos en la tierra. También los textos hindús describen a una raza reptiliana llamada “Sarpa”. A través del Medio Este y en el libro de la Génesis, se dice que una raza serpiente creo al hombre sobre gigantes que vivineron de los cielos para reproducirse con las hijas del hombre. Se les llama Nephilim. En África los llaman Chitauri (Dictadores). Los Reyes de África afirmaban descender de dioses serpientes que vinieron del cielo. Los fenicios tenían a Agathodemon, otra figura de serpiente. Los hebreos tenían a Nakhustan, la Serpiente De latón. Y la lista es más larga. Esto sugiere que el conocimiento de una raza de seres reptilianos inteligentes fue aceptada como un hecho en el pasado distante en toda la Tierra. Parece que los únicos lugares donde no se encuentra esta historia histórica es donde la historia a sido metódicamente destruida. No se sabe muchísimo sobre ellos, David Icke y Credo Mutwa, son algunos de los grandes especialistas sobre el tema. Algunos sugieren que pueden cambiar de aspecto (Spaceshifting), que significa cambio de forma. Usualmente se hacen pasar por humanos, y cambian su apariencia a reptilianos a voluntad. Parece imposible, pero al observar animales, en particular algunas especies de cefalópodos, están notoriamente dotados de la capacidad de modificar la forma y el color de su cuerpo con el objeto de asumir el aspecto de otras criaturas e incluso imitarlas. Otra hipótesis es que cuando están en la superficie y se encuentran con los seres humanos son capaces de “tocar” su mente y inducirlos vía telepática, y la mente humana débil aceptará esta orden sin rechazo y los veremos como humanos normales. También hay dos pensamientos sobre de que se alimenta. Unos piensan que se alimentan de miedo, y que les encanta por ejemplo cuando los humanos hacemos la guerra o creamos genocidios. Otros dicen que se alimentan de carne, frutas, verduras, algunos tipos de hongos. También se alimentarían de sangre humana. Hay cuatro hipótesis sugeridas sobre su origen. 1. Extraterrestres 2. Intraterrestres (viven bajo Tierra) 3. Manipulan la humanidad desde otra dimensión “poseyendo” cuerpos humanos 4. Hay varias especies de reptiles inteligentes con diferentes origenes. Pienso personalmente que todas son en realidad ciertas. Los investigadores en el fenómeno reptil concluyen que por lo menos algunos se originan en la constelación estelar de Draco. El sistema de Draco incluye la estrella Thurban, una vez la Estrella Polar del Norte, por la que las pirámides egipcias son orientadas. De acuerdo con la investigación de autor Graham Hancock, el antiguo complejo de templos en Angkor Wat en Camboya es una réplica de la constelación de Draco como habría estado en 10.500 AC. Ésta es la época cuando la Tierra y sus personas, humanos y extraterrestres, habrían estado recuperándose del cataclismo de 11.000 AC y reconstruyendo su civilización. Es ciertamente asombroso cómo las estructuras y templos antiguos, de sociedades aparentemente inconexas en todas partes del mundo, se alinean entre sí con precisión astronómica, matemática y geométrica fantástica. John Rhodes, uno de los más importantes de los investigadores de la presencia reptil, dice que podrían ser invasores del espacio que se mueven de planeta a planeta, infiltrando encubiertamente la sociedad anfitriona y prevaleciendo al final. El ejército reptil, se dice, lleva a cabo raptos de formas de vida mientras sus científicos estudian la biología e introducen el código genético reptil en especies que ellos desean manipular. Esto involucra un programa de cruzamiento y eso es precisamente lo que los textos sumerios están describiendo en relación con los Anunnaki. Como es bien reconocido, hay un área del cerebro humano hasta el día de hoy conocida como el cerebro reptil. Dentro del cerebro es el segmento original para el que todas las otras partes son adiciones. Y, de acuerdo con el neuroanatomista, Paul MacLean, esta área antigua del cerebro es conducida por otro segmento prehistórico que algunos neuroanatomistas llaman el Complejo-R. R es abreviación de reptil porque compartimos esto con los reptiles. MacLean dice que este Complejo-R juega un papel importante en, el comportamiento agresivo, la territorialidad, el ritualismo y el establecimiento de jerarquías sociales. Estos son precisamente los patrones de comportamiento de reptiles y sus híbridos reptil-humanos. El astrónomo, Carl Sagan, sabía por lejos más de lo que alguna vez hizo público y de hecho dedicó gran parte de su carrera guiar a las personas lejos de la verdad. Pero su conocimiento de la situación verdadera ocasionalmente se manifestó, como cuando dijo que:


 “…. no hace ningún bien en absoluto ignorar el componente reptil de la naturaleza humana, particularmente nuestro comportamiento ritualístico y jerárquico. Al contrario, el modelo puede ayudarnos a comprender todo sobre los seres humanos.” Él añade en su libro, Los Dragones de Edén, que incluso el lado negativo del comportamiento humano es expresado en los términos de reptil, como en asesino a sangre fría. Sagan (el nombre al revés significa a los dioses reptiles de India Oriental, los Nagas) claramente sabía mucho, pero decidió no revelar abiertamente qué sabía.